Las hojas de los pepinos, tomates y otras hortalizas a menudo se vuelven amarillas debido al clima caluroso. ¡No dejes nada al azar y actúa de inmediato!
Este problema puede afectar la calidad de la cosecha e incluso provocar la muerte de las plantas. Además de recomendar el uso de cubiertas de agrotextil blanco, es importante aplicar un fertilizante económico pero muy eficaz que ayudará a resolver el problema rápidamente, manteniendo las plantas verdes y listas para seguir produciendo.
Para preparar este remedio efectivo, disuelve una pequeña cantidad de permanganato de potasio (solo la punta de un cuchillo) en 3 litros de agua.
Añade una taza de leche al rociado de permanganato y mezcla bien.
Agrega 10 gotas de yodo para hacer el fertilizante aún más potente.
Toma 0.5 litros de esta mezcla, añade una cucharada de bicarbonato de sodio y revuelve bien hasta que se disuelva completamente. Luego, combina esta mezcla con el resto de la solución sin bicarbonato y mezcla nuevamente.
Para rociar las plantas, diluye una taza de esta solución en 5 litros de agua. Para obtener los mejores resultados, repite el tratamiento en tres semanas.