A mediados del verano, cuando el calor repentinamente cede ante el frío y la humedad, especialmente después de las lluvias, se activan todas las enfermedades fúngicas, siendo la más peligrosa la pudrición por Phytophthora.
Esta infección, conocida como mildiu de la papa, puede destruir completamente la cosecha de tomates y también puede dañar significativamente a las papas y otras cultivos. Por lo tanto, para prevenirla, es necesario tener a mano los tratamientos adecuados.
Es importante centrarse en agentes que sean efectivos contra los hongos patógenos pero suaves para las plantas. Los productos químicos fuertes, que se acumulan en el suelo, terminan en los frutos, donde su exceso es completamente indeseable. Por lo tanto, es crucial encontrar una alternativa inofensiva.
Yodo y leche
Las propiedades desinfectantes de la tintura de yodo son bien conocidas y se usa para tratar las plantas como prevención de enfermedades. Necesitarás 20 gotas de yodo y un litro de leche por cada 10 litros de agua. Rocía la mezcla sobre las plantas.
Al utilizar esta mezcla, no solo protegerás tu cosecha de enfermedades fúngicas, sino que también acelerarás su maduración. Si usas esta opción durante la maduración de los frutos, debes reducir ligeramente la concentración de yodo (5-6 gotas de yodo por 10 litros de agua).
Para aumentar la eficacia del tratamiento con yodo, debe alternarse con una tintura de ajo. Prepara el “preparado” de ajo de la siguiente manera:
Tritura 100 g de dientes de ajo pelados y añádelos a 10 litros de agua. Deja reposar durante 24 horas y luego añade un gramo de permanganato de potasio. Después, rocía las plantas con la mezcla.
Cobre
Si eres una persona ocupada y prefieres soluciones más sencillas, un producto eficaz listo para usar que puedes encontrar en las tiendas es, por ejemplo, el CHAMPION 50 WP.
Este producto a base de cobre (en forma de oxicloruro) está aprobado para su uso en agricultura ecológica. Actúa en la superficie, formando una capa protectora en la planta que protege eficazmente contra las infecciones.
Es importante aplicarlo en forma de una neblina muy fina para que forme una película efectiva que proteja contra la entrada de patógenos. Las gotas grandes del pulverizador rápidamente resbalan de las hojas y no cubren bien toda la superficie foliar.