- Cáscaras de Plátano: Entiérralas o remójalas para obtener potasio.
- Posos de Café: Ideales para plantas que prefieren suelos ácidos.
- Cáscaras de Huevo: Tritúralas y espárcelas para proporcionar calcio.
- Sal de Epsom: Disuélvela en agua para aportar magnesio.
- Melaza: Dilúyela para añadir nutrientes y estimular los microbios del suelo.
- Agua de Acuario: Llena de nutrientes beneficiosos para las plantas.
- Ceniza de Madera: Espárcela para añadir potasio y calcio al suelo.
- Gelatina: Disuélvela en agua para promover el crecimiento de las hojas.
- Leche: Mézclala con agua para aportar calcio y proteínas.
- Alga Marina: Enjuágala y pícala para obtener minerales y hormonas de crecimiento.
- Sobras de Verduras: Hiérvelas para hacer un caldo rico en nutrientes.
- Té de Malezas: Remójalas para crear un fertilizante lleno de nutrientes.
¡Experimenta con estos fertilizantes caseros y nutre tus plantas para un crecimiento robusto!