En el artículo de hoy de la serie “Hogar Llano de Flores” hablaremos sobre el cuidado de las plantas de interior en maceta durante el mes de marzo. ¿Qué debemos tener en cuenta este mes?
La mayoría de nuestras plantas ya están despertando de su sueño invernal, por lo que debemos comenzar a regarlas con mayor frecuencia. A medida que los días se alargan, necesitarán más agua. La cantidad y frecuencia de riego también dependen del tipo de planta. Generalmente, las plantas con hojas grandes requieren más agua, mientras que las de hojas pequeñas, reducidas o gruesas necesitan menos. Las plantas en floración son las que más agua demandan. Además, aquellas cultivadas en macetas de barro, que son porosas, requieren riego más frecuente que las que están en macetas de plástico. Gradualmente, también debemos comenzar a regar los cactus y, si han pasado el invierno en un lugar fresco, colocarlos en un sitio más cálido y lo más luminoso posible. Si han pasado bien el periodo de reposo, algunas deberían empezar a florecer ahora.
Trasplante y reproducción de plantas
Un procedimiento importante en marzo es el trasplante. Las plantas más pequeñas deben trasladarse a macetas más grandes, mientras que a las plantas grandes y viejas solo se les debe cambiar la capa superior del suelo. Ya hemos hablado de las reglas básicas para el trasplante en este artículo. Aprovechando el trasplante, también podemos reproducir algunas plantas. Algunas especies se reproducen por división, como las helechos, zamioculcas o sansevierias. Al sacar la planta de la maceta, la dividimos en dos o más partes, lo que nos da la oportunidad de obtener varias plantas nuevas. Otra forma de reproducción es mediante esquejes de tallo o apicales. Aprovechando que la primavera es una época favorable y que tenemos sustrato fresco para el trasplante, podemos cortar esquejes de las plantas que queremos multiplicar. De este modo, podemos reproducir, por ejemplo, dracaenas, ficus o hiedras.
Cómo reproducir y cuidar plantas en marzo
En marzo, además de las técnicas de reproducción y cuidado general de las plantas, también podemos enfocarnos en métodos específicos para plantas como las violetas africanas (Saintpaulia) y las begonias, que se pueden propagar mediante esquejes de hojas. Para las violetas africanas, basta con cortar una hoja sana de la planta madre. La hoja debe ser de un verde oscuro en la superficie; cualquier cambio en el color puede indicar problemas en el cultivo. Elige una hoja con un pecíolo largo, de al menos 3 centímetros. Plántala en ángulo en una mezcla de turba y arena fina. También funciona bien el sustrato para cactus y suculentas. Inserta el pecíolo en el sustrato hasta la base de la hoja. Riégala y colócala en un lugar cálido, pero sin luz solar directa. Puedes plantar una sola hoja, ya que de ella crecerán varias nuevas plantas. Alternativamente, puedes sumergir la hoja en agua hasta que desarrolle raíces antes de trasplantarla a una maceta con sustrato.
En marzo también reanudamos la fertilización. Las plantas de interior agotan rápidamente los nutrientes de la tierra, por lo que es necesario fertilizarlas durante el período de crecimiento. La frecuencia y el tipo de fertilizante dependen de las necesidades de cada especie. Recuerda que después de trasplantar, a menudo se recomienda esperar de 2 a 6 semanas antes de fertilizar, dependiendo del sustrato, ya que este puede contener una dosis inicial de fertilizante que podría afectar negativamente a la planta si se fertiliza en exceso.
Durante el invierno, muchas personas trasladaron las plantas cerca de las ventanas para que recibieran más luz en los días cortos y nublados. Ahora, podemos devolver las plantas a su lugar original, ajustándonos a sus necesidades de luz. Las plantas como los cactus y los cítricos pueden quedarse en lugares soleados. Las plantas de sombra, como la hiedra, pueden ubicarse cerca de una ventana orientada al norte. La mayoría de las plantas de interior se sienten más cómodas cerca de una ventana orientada al este o al oeste.
En marzo, las tiendas de jardinería y floristerías están llenas de plantas en flor que anuncian la llegada de la primavera. A menudo, compramos estas plantas impulsivamente, como primaveras, narcisos en miniatura, jacintos, muscarios y otras plantas bulbosas. Podemos crear composiciones coloridas y alegres con ellas. Sin embargo, en el calor de nuestros hogares, estas plantas tienden a florecer y marchitarse rápidamente. Además, el calor excesivo y la falta de luz pueden hacer que los tallos se alarguen en exceso.
Para disfrutar de ellas por más tiempo, colócalas en un lugar luminoso pero fresco para prolongar la floración. Si no hay heladas, puedes sacarlas al exterior. Funcionan bien como decoraciones de balcón o terraza. Una vez que terminen de florecer, retira las flores secas y sigue regando las hojas durante unas semanas. Cuando el suelo se descongele por completo, puedes plantarlas en el jardín, donde muchas de ellas volverán a florecer el próximo año.