Florista recomienda usar elementos comunes de la cocina que terminan en la basura todos los días, ni más ni menos. Estos contienen todas las sustancias que la planta necesita: fósforo, potasio, nitrógeno, carbohidratos y magnesio, “elementos dorados” para un ciclo de vida saludable de la flor.
Estos elementos traza ingresan a la planta gradualmente y, si se utilizan correctamente, aseguran una planta hermosa durante muchos años. Esta nutrición apoya a las orquídeas durante el período de floración y antes de él.
Agua mágica para orquídeas y otras plantas de interior: esto lo logra el agua de arroz común. Simplemente es agua común después de remojar el arroz.
El agua que muchos de nosotros vertemos por el desagüe está llena de vitaminas y nutrientes que las plantas necesitan, especialmente durante los períodos de floración y crecimiento.
El agua de arroz contiene muchas sustancias que se encuentran en los fertilizantes comprados para plantas. Incluye vitaminas del grupo B (especialmente B1 y B2), elementos “NPK” (nitrógeno, fósforo, potasio), almidones, grasas, carbohidratos, así como nutrientes complejos que la planta convierte en energía, fuerza y resistencia a los daños.
Puede guardar el agua en el refrigerador y usarla según sea necesario.
Riegue las orquídeas y otras plantas cada 15-20 días, pero nunca use agua fría; es necesario que el agua tenga temperatura ambiente.
La preparación es simple: sumerja 50 g de arroz en 500 ml de agua, deje en remojo durante 24 horas y luego cuele.
Fertilizante para orquídeas: la mejor y más económica con cáscara de plátano. Preparar fertilizante con cáscara de plátano es muy fácil. Aquí hay tres recetas probadas:
- Té de plátano: seque la cáscara de plátano al sol o en el radiador y luego tritúrela en polvo. Vierta 1 cucharadita en 200 ml de agua hirviendo. Deje que el líquido se enfríe y luego riegue.
- Polvo exfoliante de plátano: corte la cáscara y colóquela en una bandeja para hornear forrada con papel pergamino. Cuando la cáscara esté seca, deje enfriar y, de vez en cuando, agregue el polvo a un frasco. También se puede aplicar directamente a las raíces, frotándolo suavemente.
- Infusión de plátano: retire la cáscara de 2 plátanos y viértala en 2 litros de agua. Deje en infusión durante 2 días. Diluya el líquido resultante con agua en una proporción de 1:1.
La cáscara fresca revitalizará las hojas: tome la cáscara y úsela en el lado interno de las hojas. Obtendrán brillo y absorberán nutrientes útiles.
Fertilizante concentrado casero (en lugar de varillas de la tienda): necesita agua de cocción de arroz, melaza, leche, bolsitas de té usadas de té verde, huesos de pollo triturados.
Suena como magia, pero es una bomba nutricional. Los huesos de pollo secos y triturados son una excelente fuente de calcio y magnesio. Solo deje que se sequen al sol durante 2 a 3 días y luego tritúrelos en un polvo no demasiado fino.
Procedimiento:
- Vacíe el contenido de las bolsitas de té usadas en un tazón pequeño. No use té urológico, ya que contiene sustancias que la planta no absorberá.
- Triture algunos huesos de pollo hasta obtener un polvo.
Asegúrese de que los huesos estén finamente triturados en pequeños granos para que el producto final tenga la consistencia de la arena. Sin embargo, no triture los huesos a polvo, ya que las partículas muy pequeñas pueden dañar la planta.
La harina de hueso proporcionará calcio y magnesio a la planta, pero también reducirá la acidez del suelo, así que tenga cuidado con la cantidad de harina.
- Mezcle el té y los huesos de pollo triturados en un tazón, agregue leche y no más de una cucharadita de melaza.
Mezcle bien hasta que el líquido adquiera un color marrón.
Agregamos leche porque contiene nutrientes importantes como nitrógeno, potasio y fósforo.
- Escurra el agua de cocción del arroz y deje que se enfríe a temperatura ambiente.
Después de que el agua se enfríe, mezcle con la mezcla marrón. El agua de arroz contiene niacina, riboflavina, tiamina y otros elementos traza que las orquídeas requieren.
Advertencia: Solo se puede usar esta mezcla una vez (como máximo 2 veces) al mes durante la temporada de crecimiento, vertiéndola en el suelo.
Sin embargo, tenga cuidado con la sobre-fertilización: la señal de una fertilización excesiva es una capa blanca en el suelo y hojas marchitas o incluso secas de la planta.
Cómo aplicar fertilizante para orquídeas: adminístrelo durante la temporada de crecimiento, cuando la flor produce nuevas hojas y brotes. Úselo cada segundo riego, pero con cuidado, solo un poco.
Si ve que la planta continúa brotando, con nuevas hojas y brotes, continúe administrando el fertilizante. Si el crecimiento se detiene, deje de administrar el fertilizante.
Administre el fertilizante durante la floración. Importante: esto no se aplica a las plantas en flor que acaba de comprar. Permítales florecer y comience a administrar el fertilizante solo después de 3-4 meses.
En otoño e invierno, cuando hace calor en verano, la phalaenopsis ralentiza su crecimiento, así que no se recomienda administrar fertilizante más de una vez al mes.
Las plantas enfermas, muy debilitadas y trasplantadas no deben ser fertilizadas.