“¡Solo 1 cucharada de este ingrediente es suficiente para preservar la floreciente belleza de las rosas, los geranios y las hortensias!”

Tienes idea de las similitudes entre rosas, geranios e hortensias?

Son plantas que florecen en el mismo período y ofrecen una hermosa paleta de colores.

La gente aprecia estas plantas y las cultiva en sus jardines principalmente por sus colores vivos y vitales, que alegran los espacios al aire libre y levantan el ánimo. Si tienes estas plantas en casa, producirán abundantes flores en verano.

Estas variedades de plantas no son difíciles de cuidar, pero si sigues estos consejos super simples, podrás disfrutar de una floración duradera.

Rosas, geranios, hortensias: ¡así es cómo tratarlas para verlas florecer y prosperar! Las rosas son una de las plantas de jardín más populares y apreciadas. Se utilizan para embellecer los jardines, pero a menudo sucede que estas plantas no dan flores. De hecho, son plantas delicadas que prefieren temperaturas entre 12 y 25 grados Celsius.

Sin embargo, las rosas pueden soportar bajas temperaturas invernales que no sean demasiado extremas. Para desarrollarse perfectamente, las rosas necesitan mucha luz. Por lo tanto, debes colocarlas afuera, en el balcón o en el alféizar de la ventana.

Por otro lado, la hortensia no requiere tanta luz durante su crecimiento. De hecho, se debe evitar la exposición directa al sol. Para un desarrollo óptimo, la hortensia necesita una temperatura de 18 grados Celsius. Además, debes verificar que el suelo de tu hortensia esté húmedo. Evita dejarlo demasiado seco. La hortensia florece a partir del mes de septiembre.

Finalmente, el geranio, que es el más fácil de cultivar, solo necesita agua y luz. Se desarrolla adecuadamente a una temperatura que oscila entre 15 y 25 grados Celsius. Y no olvides colocarlo frente a la luz solar directa.

¡Solo 1 cucharada de este ingrediente mágico para una floración espectacular! El magnesio es un oligoelemento crucial para el crecimiento saludable de las plantas. De hecho, este elemento puede volverse insuficiente durante el verano y la fotosíntesis. La solución es proporcionar magnesio a tus plantas.

Para ello, toma una cucharada de esta sustancia y dilúyela en 10 litros de agua. Mezcla bien todo. Luego, riega cada planta con 2 litros de este líquido mágico. En pocos días, verás plantas más exuberantes que pronto florecerán.

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