Un fertilizante natural siempre es una excelente idea. A menudo olvidamos cómo un solo ingrediente natural puede ayudar a que las orquídeas o las plantas en general se mantengan cuidadas y hermosas durante todo el año. Veamos hoy uno de estos.
Las orquídeas son plantas delicadas que pueden agregar un toque de elegancia y belleza a cualquier hogar. Con un poco de cuidado y atención, es posible cultivar estas maravillosas plantas tropicales. Siguiendo algunos consejos sencillos, podrás disfrutar de una hermosa orquídea que prosperará durante mucho tiempo. Necesitan una buena cantidad de luz difusa, así que es recomendable colocarlas en una habitación bien iluminada, evitando la luz directa del sol. La temperatura es otro factor clave para su bienestar. La mayoría de las variedades prefieren temperaturas moderadas, entre 18°C y 24°C durante el día. La fertilización regular es otra medida importante para mantener la orquídea en buena salud.
Utiliza un fertilizante especial para orquídeas, diluido en agua, aplicado cada dos o tres semanas durante la fase de crecimiento activo y menos frecuentemente en invierno, cuando la planta está en reposo. Finalmente, vigila los parásitos y las enfermedades. El agua de arroz es rica en nutrientes que pueden favorecer un crecimiento y floración abundantes. Contiene almidón, vitaminas, minerales y materia orgánica que favorecen un desarrollo saludable de las raíces y el correcto funcionamiento de los procesos metabólicos de las plantas. Raíces saludables y vigorosas son importantes para absorber los nutrientes y respaldar la planta. El nitrógeno presente favorece la formación de hojas verdes y vigorosas, el fósforo estimula la floración y el potasio refuerza la resistencia de las plantas al estrés ambiental.
Las plantas tratadas con agua de arroz desarrollan raíces más largas y ramificadas, lo que les permite absorber más nutrientes del suelo. El resultado es una planta más saludable y una floración más abundante.