Sabías que puedes cultivar nuevas plantas suculentas a partir de partes de tus plantas existentes? Es increíblemente fácil cultivar nuevas suculentas utilizando las que ya tienes. Esto puede ahorrarte mucho tiempo y dinero al comprar más en el centro de jardinería. En este artículo te enseñamos 4 maneras de multiplicar suculentas, ya sea por semillas, tallos, hojas y vástagos
Introducción
Puedes hacer nuevas suculentas a partir de sus semillas, hojas y tallos, estas plantas bebé son excelentes regalos o simplemente para añadir a tu creciente colección de suculentas. La multiplicación de suculentas es increíblemente fácil, gratificante y, lo mejor de todo, gratuita.
Hay cuatro formas sencillas de multiplicar suculentas en casa. Te diremos paso a paso cómo hacer las tres y podrás decidir cuál es la mejor para ti y tus encantadoras plantas.
Propagación por esqueje de hoja
El corte de hojas es una de las formas más sencillas para multiplicar suculentas. Si alguna vez has golpeado tu planta al trasplantar, sabrás que esas hojas se desprenden con bastante facilidad. Pero, ¿sabías que puedes plantarlas y hacer plantas nuevas enteras con sus hojas?
1. Tirar suavemente de una hoja de suculenta con un movimiento de torsión
Tienes que coger toda la hoja, incluido el pequeño nudo donde se une al tallo. Si la hoja se parte por la mitad, no podrá echar raíces.
Una hoja perfecta tendrá forma de U en el extremo que estaba unido a la planta. Si tu hoja no es perfecta, aún puedes intentar plantarla. Hemos cultivado con éxito nuevas plantas a partir de esquejes no perfectos, pero si eliges las mejores hojas obtendrás los mejores resultados.
2. Dejar que las hojas se sequen y que los extremos se «construyan»
Coloca las hojas sobre una toalla de papel u otra superficie seca durante unos días para que los extremos se sequen. Si las puntas no se secan y se cubren de costras antes de plantarlas, la hoja absorberá demasiada agua y se pudrirá en lugar de crecer.
3. Colocar las hojas en un lecho de tierra
Una vez que el extremo cortado esté suficientemente encallecido, puedes colocar las hojas en un lecho de tierra poco profundo. Lo mejor es utilizar una mezcla para macetas específicamente formulada para cactus o suculentas.
Este tipo de tierra no retiene la humedad y da a las plantas en desarrollo la oportunidad de afianzarse sin pudrirse.
Coloca las hojas de la suculenta en un lugar bien iluminado pero no directamente soleado. Rocía las hojas con agua un par de veces a la semana, o riégalas ligeramente a nivel del suelo.
Las raíces empezarán a salir del extremo calloso en pocas semanas, seguidas de jóvenes brotes suculentos.
4. La suculenta bebé está lista para replantar
Para trasplantar la planta de suculenta, retira con cuidado la hoja original cuando la planta bebé tenga al menos medio centímetro de altura y haya echado raíces.
A continuación, puedes sacar la planta bebé de la tierra y volver a plantarla en otra maceta más grande. Asegúrate de no molestar demasiado a las raíces.
Propagación de suculentas por esquejes
Para multiplicar suculentas a partir de un tallo debes quitar las hojas y replantar la parte inferior del mismo. Las nuevas plantas crecerán en los espacios donde estaban las hojas. Los esquejes de tallo funcionan bien para las plantas que han crecido demasiado.
- 1. Utiliza unas tijeras muy afiladas y limpias o un cuchillo para cortar el tallo principal o una rama de la planta suculenta.
- 2. Retira la roseta de la parte inferior del tallo y coloca un poco de tierra en una maceta para producir una nueva planta.
- 3. Retira con cuidado las hojas del tallo restante y coloca el tallo en una toalla de papel para que se seque durante unos días.
- 4. Una vez que los puntos donde estaban las hojas se hayan encallecido, planta la base del tallo en tierra para macetas y riega ligeramente.
Sigue regando cada pocos días durante varias semanas. En pocas semanas empezarán a crecer pequeñas plantas en los espacios donde se eliminaron las hojas.
Multiplicar suculentas por esqueje de vástago
Este tipo de propagación de suculentas es mediante la reimplantación de vástagos. Se puede quitar una rama completa de una suculenta parecida a un árbol y replantarla para formar una nueva planta.
Esta es una gran opción si la planta original se ha dañado o roto, o simplemente ha crecido demasiado para su espacio.
Otras suculentas, como el aloe, el espino y la echeveria, producen pequeños vástagos que pueden extraerse y replantarse para formar una nueva planta.
Este tipo de propagación de suculentas es un poco más arriesgado porque, si no se hace correctamente, podría causar daños importantes a la planta original.
- 1. Utiliza unas tijeras o un cuchillo muy afilados y limpios para cortar la rama o el vástago de la planta madre.
- 2. Coloca el vástago directamente en la tierra de la maceta. En el caso de las ramas, elimina algunas hojas cerca del corte y empuja la rama hacia el interior de la tierra para que pueda sostenerse mientras echa raíces.
- 3. Riega cada vez que la tierra se seque. Esta nueva planta puede permanecer en una maceta durante un año o más, ya que tardará en desarrollar sus raíces.
Plantar suculentas a partir de semillas
El tiempo que tardan las semillas en germinar puede variar mucho. Te aconsejamos que utilices siempre semillas frescas del año anterior cuando propagues suculentas. Como no todas las suculentas en cultivo de interior fructifican de forma fiable, también puedes recurrir a las semillas compradas.
Empieza a sembrar en primavera, cuando las condiciones de luz son mejores y los días vuelven a ser más largos. Siembra las semillas en macetas pequeñas y presiónalas ligeramente. A continuación, pon un poco de abono para semillas, sólo un poco y preferiblemente tamizado.
Coloca las macetas en un lugar parcialmente sombreado. Las semillas no deben secarse completamente hasta que germinen, pero la experiencia ha demostrado que es mejor no regarlas desde arriba, sino colocar las macetas en cuencos llenos de agua.
La mejor temperatura de germinación para las semillas de suculentas es entre 20 y 25 grados Celsius (un poco más fría por la noche). También necesitan una humedad elevada para crecer.
Para ello, se recomienda colocar las macetas en un mini-invernadero o mantenerlas bajo lámina. Lo único importante es que ventile a diario y retire la cubierta en cuanto las semillas germinen.
Consejos para el éxito al reproducir suculentas
Utiliza tierra para suculentas o cactus cuando las quieras propagar. Como plantas desérticas, las suculentas tienen necesidades específicas de agua, y la tierra básica para macetas puede retener demasiada agua para sus raíces.
No expongas las plantas suculentas a la luz solar directa, ya que ésta puede quemar sus tiernas hojas e inhibir su crecimiento.
Utiliza siempre tijeras y cuchillos limpios y afilados para cortar las suculentas. El uso de herramientas sucias, sin filo u oxidadas puede propagar enfermedades o dañar las plantas.