No hay nada mejor que tener plantas aromáticas en casa. Además de su uso en la cocina, este tipo de plantas también son muy útiles para aromatizar la casa, y entre ellas la menta es sin duda una de las más fragantes.
Si estás buscando una solución que te permita tener siempre a mano una pequeña planta de menta y, al mismo tiempo, decorar un rincón de tu casa, la que te sugerimos a continuación seguramente será ideal para ti.
Se trata de un método para cultivar una plantita de menta en una taza. Una idea encantadora y original, que es perfecta para aquellos que tienen poco espacio y desean perfumar toda la casa.
Además, la menta tiene propiedades medicinales que ayudan a aliviar problemas digestivos, es expectorante y tiene un efecto calmante.
Para plantar menta en una taza necesitarás:
- Una taza de cerámica lo suficientemente grande.
- Cinta adhesiva para paredes.
- Taladro.
- Fertilizante.
- Tierra.
- Agua.
- Semillas de menta.
Cómo cultivar menta en una taza paso a paso:
- Voltea la taza, pega un trozo de cinta adhesiva y marca 2 x, donde realizarás dos agujeros con el taladro. Estos agujeros garantizarán un buen drenaje.
- Prepara el fertilizante y la tierra, y colócalos en la taza.
- Luego coloca un par de semillas de menta y cubre con un poco de tierra. No es necesario enterrar las semillas, solo agregar una capa delgada de tierra encima.
- Espera a que las semillas germinen y comiencen a convertirse en una maravillosa plantita de menta.
- Riega solo cuando la tierra esté seca. Recuerda que en un espacio tan pequeño como una taza puede acumularse mucha humedad.
- Coloca la taza en un lugar iluminado por la mañana pero a la sombra durante las horas de la tarde.