Orquídeas: ¡Crecerán rápidamente si las plantas de esta manera!

Eres un apasionado de las orquídeas pero te resulta difícil cultivarlas correctamente?

Descubre cómo hacerlo de manera efectiva para obtener plantas que prosperen y florezcan en cada estación, gracias a un secreto recientemente revelado por expertos jardineros.

Sabías que existe un método infalible para potenciar el crecimiento de tus orquídeas y prevenir la pudrición?

Se trata de un procedimiento sencillo y fabuloso que te permitirá tener plantas sanas y fuertes en poco tiempo.

Cómo lograr que tus orquídeas estén sanas y produzcan flores generosamente?

Si enfrentas dificultades en el cultivo de tus orquídeas, no te preocupes, porque a continuación compartiré contigo el secreto de un jardinero experimentado para obtener orquídeas hermosas y saludables durante todo el año.

Primero, consigue una botella de plástico de 5 litros. Retira el tapón y haz un agujero lo suficientemente grande para que quepa tu planta. En el fondo de la botella, realiza algunos agujeros de drenaje con un cuchillo.

A continuación, saca con cuidado la orquídea de la maceta y comienza a retirar la tierra de la planta; después, corta las raíces secas y podridas. Prepara la mezcla natural que utilizarás para abonar la planta.

Vierte 500 ml de agua en un recipiente, machaca 2 dientes de ajo y agrégales al agua. Mezcla bien y deja reposar un rato antes de colarlo. De esta manera, todas las propiedades del ajo se transferirán a la solución. Luego, empapa un algodón en la solución y limpia las hojas de tu planta.

Por qué realizar este paso?

Simplemente para proteger tus orquídeas de los hongos. El ajo y sus virtudes tienen el poder de ejercer una acción fungicida.

A continuación, sumerge las raíces de tu planta en la solución de ajo durante 15 minutos. Después, toma un poco de corteza de pino.

La fase final de este método consiste en colocar la botella de plástico y poner dentro una esponja verde clásica en trozos pequeños. Luego, agrega la corteza de pino y la orquídea recién remojada en agua y ajo. Cubre las raíces con una capa de corteza de pino y rocía con la solución de ajo.

Repite esta operación una vez cada dos semanas para obtener una orquídea sana, robusta y que florezca en abundancia.