Jugosa zanahoria, crecimiento rápido de brotes sin necesidad de adelgazar los surcos: todo esto es posible si, en lugar del método convencional de siembra, utilizas pegamento de almidón.

En la fase preparatoria, necesitarás:
- 2 litros de agua
- 3 cucharadas de almidón
- Un embudo
- Una botella de plástico de 2 litros
- 2 cucharadas de semillas de zanahoria
En un tazón, mezcla 3 cucharadas de almidón con agua a temperatura ambiente. Luego, vierte esta mezcla en una olla con agua hirviendo y déjala hervir mientras revuelves constantemente hasta que los grumos se disuelvan por completo. La pasta terminada debería caer libremente de la cuchara.
Después de enfriar la pasta, viértela en la botella. Con la ayuda de un embudo, vierte las semillas de zanahoria en la botella. Para 1 litro de pasta, necesitas 1 cucharada de semillas (en este caso, tenemos 2 litros de pasta y 2 cucharadas de semillas).
Es hora de preparar los surcos. Primero, riégalos.
La tarea es simple: debes verter uniformemente el contenido de la botella a lo largo de los surcos. La frecuencia de siembra de las zanahorias dependerá de la velocidad de riego y del grosor del flujo.
La forma más sencilla es verter la pasta en áreas específicas en pequeñas cantidades. El líquido transparente permite tener una buena visión de dónde se encuentran las semillas y cuál es la distancia aproximada entre ellas.
En caso de que dejes la botella parada y la uses después de un tiempo, no olvides agitarla. Después de aplicar la pasta en todos los surcos, espolvorea las semillas con tierra.

Un beneficio adicional para las semillas con este método de siembra es la creación de un microclima especial. A diferencia del agua normal, la pasta no se seca tan rápidamente, proporcionando a las semillas no solo la humedad adecuada, sino también una humedad constante. Como resultado, las primeras plántulas de zanahoria aparecerán mucho antes.