El aguacate es una fruta con varias propiedades que proporciona una buena cantidad de nutrientes en nuestras comidas. Además de sus beneficios para la piel y el cabello, es una fruta con múltiples virtudes que siempre puedes tener en tu refrigerador. Aunque pueda parecer imposible, cultivarlo es sencillo. Siguiendo estos consejos, puedes tener tu propia planta y disfrutar de esta fruta en casa. Hoy aprenderemos cómo germinarlo.
Lo que necesitarás:
- Una semilla de aguacate
- Una toalla de cocina húmeda
- Bolsa de plástico sellable
- Recipiente de vidrio
- Poliestireno expandido reciclado
- Agua
Paso a paso:
- Toma tu semilla de aguacate y límpiala a fondo para eliminar cualquier rastro de pulpa de aguacate. Esto evitará que se pudra al entrar en contacto con la humedad.
- Envuelve la semilla en la toalla húmeda, asegurándote de que esté completamente cubierta. Es importante que la tierra esté húmeda para que la semilla pueda germinar. La humedad y el calor crean el ambiente más favorable para este proceso.
- Coloca la semilla envuelta dentro de la bolsa y séllala herméticamente.
- Pon la bolsa que contiene la semilla en un lugar cálido y oscuro, como debajo de un estante, para promover la germinación.
- Déjalo durante 2-3 semanas, recordando humedecer la toalla siempre que se seque.
- Cuando veas que tu semilla de aguacate ha brotado y las raíces son largas, es un buen momento para sacarla de la bolsa.
- Corta el poliestireno expandido al tamaño del diámetro del vaso elegido, también cortando un círculo central más pequeño que tu semilla. Esto sostendrá nuestra semilla, evitando que caiga al agua.
- Llena tu vaso con agua.
- Coloca el poliestireno e inserta la semilla con sus raíces en él, luego colócalo en un lugar luminoso (por ejemplo, en el borde de una ventana).
- Cambia el agua una vez a la semana.
- Transfiere a una maceta con tierra (o al jardín) en primavera.
- ¡Solo queda esperar hasta que puedas degustar las deliciosas frutas!
Consejos para el cultivo en maceta:
- Tamaño de la maceta: Comienza con una maceta de 5 litros y aumenta a 30 litros. El trasplante dará fuerza a tu planta y permitirá que sus raíces crezcan libremente. Si no quieres trasplantar con demasiada frecuencia, puedes saltar de 5 litros a 60 litros.
- Tierra: Los aguacates prefieren un suelo ácido con un pH entre 5 y 7. Una mezcla adecuada es partes iguales de turba, vermicompost y fibra de coco, con un poco de perlita para promover un buen drenaje.
- Riego: Mantén la tierra húmeda, con especial cuidado durante el verano, cuando necesitará más riego. Un buen drenaje es esencial, ya que a los aguacates no les gusta el suelo encharcado. Introduce tu dedo en la tierra para verificar el nivel de humedad.
- Poda: Cuando tu planta alcance su primer año, es hora de la primera poda. Recorta la planta para estimular el crecimiento horizontal cuando alcance aproximadamente 60 cm de altura. Te gusta esto?¡Comparte inspiración con tus amigos!