Ciertos cultivos resultan complicados de podar, ya que no tienen afinidad por enraizarse fácilmente.
Sin embargo, existe un método sencillo para obtener raíces incluso de tallos secos.
El truco radica en la miel, la cual debe ser natural y ayudará a estimular el crecimiento de las raíces.
Se sabe que la miel floral contiene biogénicos estimulantes y fitohormonas que no se encuentran en otros estimulantes de crecimiento, especialmente los químicos.
Preparación:
Lo más común es utilizar una cucharadita de té por cada litro de agua para enraizar esquejes.
Para que la miel se disuelva más rápidamente, se debe diluir en una pequeña cantidad de agua tibia (NO CALIENTE) y luego añadir la cantidad adecuada de agua fría.
Coloque los esquejes en la solución resultante, ya sea completamente sumergidos o solo la parte inferior. Deje los esquejes en la solución durante 24 horas. Durante este tiempo, absorberán sustancias biológicamente activas.
Las plantas leñosas o cultivos que rechazan germinar necesitarán más tiempo, mientras que las plantas herbáceas y menos exigentes requerirán menos.
Luego, pueden ser plantadas. Para que el estimulante de crecimiento (miel) permanezca en los esquejes el mayor tiempo posible, no deben clavarse directamente en el suelo. En su lugar, primero haga un hoyo en la tierra, inserte el esqueje, presione la tierra alrededor de él y riegue.