“4 plantas que no se deben podar en primavera”

De manera creciente, muchos jardineros reducen la frecuencia de corte de sus céspedes para preservar la diversidad, especialmente en el mes de mayo. Sin embargo, otras plantas también merecen un poco de descanso en primavera. Aunque el retorno del buen tiempo invita a las labores de jardinería, es importante tener cuidado con el exceso de entusiasmo al usar las tijeras de podar. La poda puede ser beneficiosa para algunos árboles y arbustos en esta época, pero no todas las plantas responden de la misma manera, y algunas podrían deteriorarse si no se tiene precaución. Aquí hay 4 plantas que no deben podarse en primavera.

  1. Seringat El jazmín de los poetas requiere toda la delicadeza y atención que sugiere su encantador nombre. Esto incluye esperar a que termine la floración antes de realizar la poda (el forsitia se encuentra en la misma situación). Es un arbusto que florece a finales de primavera, y se desaconseja cortar tallos que aún no han florecido. Sin embargo, debe podarse tan pronto como se desvanezcan las flores, ya que en esos brotes aparecerán los futuros brotes para las flores que florecerán en mayo y junio del próximo año.
  2. Setos La ley prohíbe a los agricultores la poda de setos desde el 15 de marzo hasta el 31 de julio, y recomienda a los particulares no podar setos ni podar árboles desde el 15 de marzo hasta el 31 de julio. A partir de mediados de marzo, comienza la temporada de anidación para las aves. Podar en este momento puede destruir nidos y perturbar a estos animales durante una parte crucial de su ciclo de vida. Por lo tanto, la recomendación de no podar en primavera no es tanto para las plantas en sí, sino para proteger la fauna local.
  3. Lilas Si se realiza una poda demasiado temprana, se corre el riesgo de pasar un año sin flores. Es esencial esperar hasta el final de la floración, cuando las flores se vuelven marrones, para realizar la poda. Retire las flores marchitas, acorte las ramas invasivas o muertas que desequilibran el arbusto y elimine los brotes en la base del lila que lo debilitan. Airear el centro del arbusto permitirá que circule el aire y la luz, lo que le permitirá generar nuevos brotes durante el verano y obtener hermosas flores para la próxima primavera, incluso si la poda no fue perfecta.
  4. Arce japonés Este árbol ya tiene un crecimiento muy lento que puede arruinarse fácilmente con una poda incorrecta, especialmente si se realiza en el momento equivocado. En general, se desaconseja podar el arce japonés a menos que sea un ejemplar viejo que lo necesite. Lo cierto es que, si realmente desea podarlo, debe evitar hacerlo en primavera cuando necesitará toda su energía. Prefiera realizar la poda durante el invierno o a fines del otoño, evitando las épocas de heladas. Es crucial respetar estrictamente el periodo de noviembre a marzo para podar un arce japonés si se desea mantenerlo saludable.