Cómo usar las cenizas de madera en el jardín: 5 usos astutos

¡Si disfrutas encendiendo una pequeña chimenea o aprovechando el calor de la estufa de leña en otoño o invierno, seguramente te has dado cuenta de la gran cantidad de cenizas que se acumulan y no sabes qué hacer con ellas! La buena noticia es que estas cenizas son excelentes para el jardín. Los jardineros de todas las generaciones las han utilizado durante mucho tiempo para proporcionar a sus cultivos todos los valiosos nutrientes que aportan. Es como el poso de café o el papel periódico; ¡es una forma inteligente de reciclar! Por lo tanto, es beneficioso almacenarlas en un cubo o bolsa hermética para esparcirlas en el jardín y aprovechar sus múltiples usos después de pasarlas por un tamiz. Aquí te explicamos cómo utilizar las cenizas de madera en el jardín.

  1. Las cenizas como buen fertilizante natural para el jardín Las cenizas son ricas en potasio, calcio, fósforo, magnesio, sílice y otros elementos. Es esta riqueza de minerales lo que las convierte en un fertilizante natural tan poderoso. Estos minerales y oligoelementos favorecen la floración de arbustos y árboles frutales en el huerto, así como la floración y desarrollo de flores, frutas y verduras en el jardín y el huerto. No solo ayuda en la fructificación, sino que también, al corregir la acidez del suelo, permite que las plantas desarrollen raíces fuertes. Este enmienda es apreciada por rosales, bambúes, cítricos, frutas pequeñas, hortalizas de fruto (berenjena, pepino, judía, tomate…), hortalizas de flor (alcachofa, brócoli, coliflor…) y hortalizas de raíz (zanahoria, nabo, papa…) cuyo desarrollo se ve estimulado.
  2. Las cenizas contra plagas y parásitos del jardín Usar cenizas para repeler caracoles y babosas en el jardín es un método bien conocido. De hecho, funciona como un buen repelente para proteger las plantas jóvenes de sus ataques. Para hacerlo, se esparcen alrededor de las plantas para crear una barrera protectora. Sin embargo, esta protección se disipa con el rocío o la lluvia, por lo que es necesario volver a esparcir o complementar con otros repelentes naturales contra estos indeseados. Si se esparcen en un surco, también pueden alejar a las pulgas de las rábanos y coles. Finalmente, un jardinero también puede usarlas de manera puntual y localizada para desalojar algunos pulgones de grandes hojas, como las del repollo.
  3. Las cenizas para corregir la acidez del suelo del jardín Debido a su naturaleza calcárea, las cenizas se utilizan con frecuencia para corregir suelos ácidos. Sin embargo, es lógico evitar su uso en suelos ya muy calcáreos, ya que empeora la alcalinización. También es importante tener en cuenta que las lombrices y otros microorganismos beneficiosos del suelo adoran las cenizas de madera. Esparcir cenizas mejora la infiltración del agua en el suelo. Aunque a diferencia de una creencia común, ¡las cenizas no destruyen el musgo de un césped! Sin embargo, al corregir la acidez del suelo, ayudan a limitar la aparición del musgo.
  4. Para agregar al compost

Las cenizas son totalmente compostables dentro de sus residuos verdes y residuos marrones, pero en pequeñas cantidades. De hecho, abusar de ellas podría dificultar la buena aireación necesaria para una descomposición eficiente de los elementos del compost. Además, podría ralentizar la actividad bacteriana en el compost. Por lo tanto, es mejor limitarse a una pequeña cantidad de vez en cuando en su humus para ayudar a reducir los malos olores.

  1. Otros consejos de jardinería ¡Las cenizas no solo son útiles para ser utilizadas alrededor de las plantas como fertilizante! Por ejemplo, las cenizas de madera son una excelente alternativa a la sal o al bicarbonato de sodio para despejar un camino nevado. De hecho, su textura es similar, lo que ayuda a derretir la nieve. Además, puedes rodar tus bulbos en cenizas de madera para reducir los ataques de caracoles y la proliferación de hongos.

Precauciones antes de usar las cenizas en el jardín Antes de usar las cenizas de madera, asegúrate de que estén frías y apagadas. Esto evita quemar las plantas y provocar incendios. Además, deben manipularse solo con guantes protectores durante la dispersión en el jardín, ya que son ligeramente cáusticas. Durante la dispersión, la moderación es clave, ya que se quiere evitar asfixiar los suelos a toda costa. Una pequeña cantidad tamizada cuidadosamente para evitar trozos grandes será más que suficiente. Luego, entiérralas ligeramente con un rastrillo para evitar que se endurezcan.

Además, incluso en pequeñas cantidades, las cenizas son incompatibles con ciertos tipos de jardines. Por ejemplo, son pobres en nitrógeno pero ricas en calcio. Por lo tanto, no son apreciadas por las plantas acidófilas (azaleas, camelias, arces japoneses, rododendros, etc.). Finalmente, desaconsejamos el uso de algunas cenizas:

-No uses cenizas de madera barnizadas, pintadas o tratadas para no contaminar el suelo con residuos de productos químicos. ¡Ten cuidado de no quemar plástico! Utiliza solo madera no tratada. -Evita el uso de cenizas de carbón mineral, que son muy tóxicas en el jardín. -Finalmente, evita absolutamente el contrachapado, la madera compuesta o los paneles OSB ricos en colas y resinas químicas.

Otros consejos basados en cenizas… Además de su contribución beneficiosa al jardín, las cenizas resultantes de la combustión de madera también tienen aplicaciones prácticas en las tareas del hogar. Son ideales para la limpieza del hogar. Si no utilizas todo en tus espacios verdes, puedes considerar guardar cenizas para hacer jabón de ceniza y, en general, para realizar tareas domésticas.

Las cenizas se pueden utilizar como un limpiador abrasivo natural para superficies duras como cocinas, fregaderos de acero inoxidable, cristales de chimeneas o estufas, y encimeras. También pueden servir para pulir algunos metales, como la plata empañada. Simplemente mezcla las cenizas con un poco de agua para formar una pasta ligeramente abrasiva. Aplícala sobre la superficie a limpiar, frota suavemente y luego enjuaga.

Las cenizas también tienen la capacidad de absorber olores desagradables. Coloca una pequeña cantidad de cenizas en un plato o bolsa permeable y colócalo en el refrigerador, armarios u otros lugares propensos a olores no deseados. Además, en invierno, las cenizas pueden ser útiles para aumentar la adherencia en superficies heladas. Espárcelas en senderos y aceras para ayudar a derretir el hielo y proporcionar tracción adicional.