Hasta las plantas se llenan de polvo, pero necesitan un poco más de cuidado y atención para limpiarse. Veamos cómo.
Una sola gota de un ingrediente natural puede bastar para limpiar las plantas de interior de forma rápida y eficaz.
PLANTAS DE INTERIOR: CUIDADOS
Las plantas aportan alegría al hogar y, al cuidarlas, se elimina el estrés. Así lo atestigua un estudio realizado en Pandemic, sobre el aumento de la creación de rincones verdes en el hogar.
Sin embargo, las plantas también necesitan cuidados. Por ejemplo, deben limpiarse adecuadamente para que, a través de sus hojas, puedan foto sintetizarse correctamente. Además, una limpieza adecuada elimina el riesgo de enfermedades por moho o plagas. Veamos el remedio de la abuela para pulir y limpiar eficazmente las hojas.
Cómo limpiarlos del polvo
Muy a menudo, para limpiar las hojas de las plantas de interior, se compran productos químicos que, a menudo, prometen y no cumplen. En realidad, no es necesario gastar mucho dinero en productos, sino utilizar una sustancia natural. Limpiar las plantas del polvo no sólo evita la formación de moho u otros problemas, sino que también puede hacer que las hojas estén más bonitas y brillantes. Una forma de hacer que las plantas sean aún más bonitas a la vista.
Necesitarás dos ingredientes naturales: agua y vinagre de vino blanco. Para utilizarlos en tus plantas, tendrás que mezclar dos cucharadas de vinagre de vino blanco con 4 litros de agua. Después de mezclarlos, utiliza una cuchara de madera para mojar un paño de microfibra en ella.
Para limpiar las hojas de tus plantas, deberás sujetar una hoja cada vez, desde abajo, con una mano. Con la otra mano pasarás el paño de microfibra sobre ella. La misma operación debe hacerse también en el envés de las hojas. Pasar el paño por debajo es muy importante, ya que es ahí donde podrían anidar insectos y plagas. El resultado es sorprendente desde la primera pasada. Lo que lo convierte en un método muy fácil y rápido de poner en práctica.
Estos ingredientes deben utilizarse en las hojas de la planta periódicamente, por ejemplo, una vez cada quince días, ya que el vinagre puede dañar las hojas a largo plazo.
Esta limpieza funciona para todo tipo de plantas de hoja lisa como ficus, crotons, filodendros, aralia. También sirve para suculentas, plantas de interior o incluso plantas de exterior. También sirve para plantas artificiales.
Este método es eficaz porque el vinagre blanco actúa como un ácido que disuelve las sales minerales incrustadas en las hojas, evitando que se deposite polvo en ellas, elimina todo rastro de cal y restaura el brillo y el lustre natural.
Además, el olor del vinagre es un excelente repelente para las plagas o mascotas que quisieran mordisquear las hojas. Para plantas especialmente delicadas, se pueden utilizar gotas de limón.