Cocinar en una placa vitrocerámica o de inducción es muy agradable. Los ajustes de temperatura de cocción son extremadamente precisos y ajustables. Así que muchos hogares se han rendido a la idea, ¡a pesar de que estas placas son a veces más caras! Por otro lado, la superficie es frágil y hay que protegerla de los arañazos. Por eso, limpiar las placas de vitrocerámica o de inducción en las cocinas equipadas con ellas no siempre es fácil. Es difícil saber cómo quitar las salpicaduras de aceite, un derrame de leche que ha hervido demasiado en las cacerolas y las manchas de comida quemada. Aquí tienes nuestros consejos de abuela para limpiar y abrillantar tu placa de cocción de forma segura y sin dañarla. Sea cual sea el tipo de placa que tengas (de inducción o vitrocerámica), seguro que encuentras una solución eficaz para mantener tu cocina impecable.
¡Cuidado con el calor residual tras la cocción en vitrocerámica! Podría quemarse. Espere a que desaparezca el calor antes de limpiar la placa.
1) Piedra de arcilla
Empapar una esponja suave en piedra arcillosa y frotar la placa vitrocerámica. Aclare con agua limpia y limpie con un paño suave y húmedo. Este quitamanchas tan versátil y eficaz también lo puedes preparar tú mismo con productos básicos (arcilla, aceites esenciales, etc.). ¡Sólo necesita conocer las mejores recetas!
2) Jabón negro
Con una esponja húmeda, aplique una cantidad generosa de jabón negro líquido. Frota ligeramente, aclara y seca con un paño. Y ya que tienes el jabón negro a mano, aprovecha para limpiar el suelo o la ropa. No te faltarán usos para este inigualable producto de higiene y hogar.
3) Meudon blanco
Si su placa de cocción está muy sucia, el blanc de Meudon es la solución ideal para limpiarla. Mezcle una cucharadita de agua con 2 cucharaditas de blanc de Meudon. Utilizando una esponja suave, aplique el producto sobre la placa de cocción y después aclare bien. Esta poción desengrasará a fondo su placa de cocción y le devolverá la vida.
4) Bicarbonato sódico
Coloca en un cuenco dos vasos de bicarbonato de sodio y un vaso de agua. Mézclalos bien. A continuación, aplicar la pasta resultante sobre la bandeja de horno con ayuda de una esponja. Dejar actuar durante veinte minutos. A continuación, retira la pasta de bicarbonato con una esponja húmeda. Ya está, ¡limpio!
5) Vinagre blanco
Pon un poco de vinagre blanco en un pulverizador, rocía la encimera y límpiala con una esponja. Por último, pula con un paño suave. Tu electrodoméstico, placa de inducción y vitrocerámica quedarán como nuevos.
Últimos consejos:
Muchos de estos trucos pueden aplicarse a quemadores convencionales, ollas y sartenes o encimeras manchadas por los residuos de la cocina. Sólo queda pasar un paño de microfibra limpio. Y para la campana, tendrás que hervir agua con jabón o bicarbonato o pasar por el lavavajillas. Así, la cocina y su entorno quedarán impecables.