Plantas secas: 5 consejos para salvarlas

Como aficionado, puedes acabar con una planta dañada y en mal estado. A veces es porque nos hemos olvidado de estas plantas en un rincón o no les hemos dado los cuidados adecuados. También puede ocurrir que te vayas de vacaciones, por ejemplo durante los meses de verano, y el calor y la falta de riego hagan que las plantas se cansen y muestren signos de daños graves. Afortunadamente, como demuestra nuestro artículo sobre cómo salvar plantas “muertas”, siempre es posible insuflar nueva vida a una planta verde y cansada. Además, estos consejos suelen funcionar igual de bien para las plantas de interior que para las frágiles plantas de exterior. Así que, amigos jardineros, aquí tenéis algunos consejos de jardinería para salvar una planta seca y ponerla en marcha de nuevo.

Contenido

1) Cómo identificar una planta verdaderamente muerta

plante morte
Créditos: iStock

La falta de cuidados o de riego puede hacer que algunas plantas reaccionen con rapidez. Si se secan, sus flores pueden secarse o caerse, su tierra puede secarse y agrietarse, o sus hojas pueden volverse amarillas, marrones o incluso negras. Y aunque estos signos de debilidad muestran que una planta va mal y pueden ser impresionantes, no significan que debas rendirte. A pesar de estos síntomas, ¡la planta puede resurgir de sus cenizas! Sin embargo, antes de empezar a esforzarse, tendrá que realizar algunas comprobaciones que le proporcionarán valiosas pistas…

Raspe suavemente los tallos para desvelar los secretos de las plantas

Raspa el extremo del tallo para ver qué ocurre bajo la corteza, y luego ve subiendo hasta la base. Si el interior está verde o con savia, ¡esto es más que prometedor ! Significa que la planta aún está sana y que puedes volver a ponerla en marcha fácilmente. Si todo lo que ve es marrón o negro, ya es menos atractivo salvar el arbusto en cuestión. No obstante, con un poco de esfuerzo y paciencia, aún podrá salvar su planta debilitada. Si le tiene un cariño especial y le da pena tirarla a la basura, puede que merezca la pena. Sin embargo, para saber si debes perseverar,comprueba el estado de sus raíces.

Raíces, ¡otro indicador precioso!

Los tallos pueden cortarse y volver a crecer. Sin embargo, si las raíces no están sanas, hay pocas posibilidades de que el rescate sea un éxito. Si el raspado ha revelado tallos marrones, ahora tendrás que echar un vistazo a las raíces para ver si la planta aún puede sobrevivir. Para ello, quita las raíces. Si las raíces son marrones y blandas, es mejor no continuar. Si, por el contrario, son blancas, puedes simplemente eliminar las raíces muertas y pasar a la siguiente fase.

2) Corta las partes dañadas de las plantas secas.

Maladie feuilles endommagées plante d’intérieur desséchée Spathiphyllum Sensation
Créditos: iStock

Para que pueda volver a ponerse en marcha y gozar de buena salud, es necesario eliminar las partes dañadas, que desperdician agua y nutrientes innecesariamente, además de contribuir a debilitar la planta y exponer las partes sanas al desarrollo de enfermedades fúngicas. Sin embargo, antes de trabajar en las partes dañadas, debe recordar a toda costa desinfectar las tijeras de podar o la herramienta de corte con alcohol. A continuación, retira las flores muertas, las ramitas o las ramas pequeñas. Empieza por las puntas, y luego detente cuando veas savia o verde. Elimine todo lo marrón y deje con cuidado las partes vivas, así como el tallo principal.

3) Intentar comprender lo ocurrido

Para encontrar el remedio adecuado, hay que empezar por entender por qué la planta ha acabado en ese estado. Demasiada agua, poco riego, falta de luz, proliferación de insectos nocivos o de ácaros… A menudo, investigar las necesidades reales de la planta en Internet o en un centro de jardinería te ayudará a identificar la causa de su malestar y a saber qué puedes hacer de forma diferente en el futuro. Con tu planta en su punto más débil, necesitarás poner en marcha inmediatamente tus nuevos propósitos para permitirle revivir y empezar de nuevo con eficacia.

4) Riego cuidadoso y bien pensado

Muy a menudo, una vez realizado el diagnóstico, nos damos cuenta de que son los problemas de riego los que actúan cuando una planta parece secarse. Al igual que una luz adecuada y unas condiciones climáticas agradables para las plantas, el agua es un elemento vital. Por lo tanto, debe procurar regarse bien sin ahogarla (para evitar que se pudra) y esperar siempre entre dos riegos antes de añadir más agua. Si el problema no es la falta de agua, sino el exceso de humedad, añada bolas de arcilla (o guijarros) y un plato más grande al pie de la maceta. Antes de regar, averigüe si su planta tolera el agua dura. Si la respuesta es negativa, utilice agua de lluvia o agua más adecuada que la del grifo.

5) Trasplantar para salvar una planta seca

rempotage rempoter une plante malade ou desséchée changer pour un pot plus grand tous les deux ou trois ans
Créditos: iStock

En general, se considera que las plantas de maceta deben trasplantarse cada dos o tres años. Esto permite que sus sistemas radiculares se desarrollen de forma saludable, sin lo cual las plantas muestran rápidamente signos de debilitamiento. Además, la tierra puede perder nutrientes con el tiempo, lo que no es bueno para su salud. Una tierra fresca y una maceta más cómoda pueden dar una nueva vida a tu planta. El trasplante también es necesario para la tierra que está demasiado seca y ya no es capaz de retener también el agua. También es una buena forma de comprobar el estado de las raíces, para asegurarse de que no están ni demasiado secas ni demasiado quebradizas. Entre el trasplante y la adición de abono verde cuando sea necesario, tu planta en apuros encontrará todos los nutrientes que necesita para un crecimiento sano.

¿Cómo se evita que una planta vuelva a secarse?

Es mejor la prevención que un plan de rescate, cuyo resultado no es necesariamente seguro. Y cuando se trata de esto, ya lo habrás entendido: es importante conocer las necesidades de tus plantaciones para adoptar las medidas adecuadas. Si proporcionas a tus plantas el agua que necesitan (ni demasiada ni muy poca), espacio suficiente, buena tierra y las condiciones climáticas y de iluminación adecuadas, tendrás todas las herramientas que necesitas para cultivar plantas hermosas.

Queda la cuestión de las ausencias prolongadas, sobre todo para las vacaciones de verano. Elegir plantas resistentes al calor y a la sequía puede ser una clara ventaja en este caso, sobre todo en una región cálida donde las lluvias estivales son escasas. La próxima vez, piense en oyas (u ollas) para las plantas en el suelo o gel de riego casero para suministrar agua sobre la marcha y ahorrar este preciado recurso. Mantener buenas relaciones con tus vecinos o familiares también puede ser una forma de intercambiar buenas prácticas: cuando estés fuera, tus seres queridos pueden recoger tu correo y cuidar de tus plantas por ti… ¡a cambio!


Una vez que haya puesto en práctica todos estos consejos, lo único que tendrá que hacer es tener paciencia. Hay esperanza y, con los cuidados adecuados, tu planta recuperará su fuerza y belleza con el paso de los meses. Lo único que necesita es un poco de tiempo y cariño 😉.