Cada orquídea necesita cuidados diferentes de una variedad a otra. Esto permite que crezcan adecuadamente estando sanas. Si no consigue cuidarlas, sus plantas se deteriorarán rápidamente e incluso acabarán muriendo. Si aún puede salvar sus orquídeas, necesita adoptar algunos consejos de jardineros experimentados. Le permitirán devolver la vida a sus plantas secas o marchitas rápidamente. Póngase manos a la obra ahora mismo siguiendo esta guía paso a paso.
¿Qué puede hacer para devolver la vida a su orquídea seca?

Su orquídea se está muriendo cuando las raíces se vuelven blancas, almidonadas y marchitas. En cuanto a las hojas, caen hacia abajo y se marchitan. A veces se vuelven amarillas y las flores también se caen. Los tallos se vuelven marrones y negros. Todo esto ocurre por falta de agua, demasiada agua, calor excesivo o una temperatura demasiado baja.
Para recuperar su orquídea, ponga su maceta en un barreño con agua durante 10 minutos para sumergir bien las raíces. Esta es una forma de llegar la humedad hasta las raíces para que la tierra esté uniformemente húmeda. A continuación, saque la maceta del recipiente con agua y deje que el agua salga por los agujeros de drenaje para evitar que el agua se estanque y provoque la pudrición de las raíces.
Si no desea llevar a cabo esta forma de riego, debe asegurarse de regar sus orquídeas con regularidad. Cuando la tierra de la maceta está húmeda, sus plantas pueden alimentarse bien con agua y nutrientes de la tierra.
Por regla general, las orquídeas deben regarse una vez cada 7 días en primavera y verano y una vez cada 14 días en otoño e invierno. Sin embargo, esto depende mucho de la temperatura y las condiciones del interior de su casa. Tenga en cuenta que debe esperar a que se seque la capa superior de tierra de la maceta antes de regar.
Cuando no riegue sus orquídeas, cepille las hojas y las raíces cada 2 días. Este es un truco para generar un microclima húmedo a la vez que ayuda a salvar a su orquídea de la sequía.