¡Utiliza este truco de agricultor para obtener albahaca y romero abundantes y fragantes! ¡Incluso crecerá menta y perejil!

Lasplantas aromáticas son muy esenciales para diversas preparaciones en la cocina. Son el toque secreto para realzar el sabor de los platos y añadir color. Incluso los cocineros novatos puedentransformar un plato monótono en una receta sabrosa añadiendo unas hojas de albahaca o perejil.

Pero los beneficios no acaban ahí. A diferencia de muchos otros alimentos, las hierbas están disponibles todo el año. Si se cultivan en casa, pueden almacenarse fácilmente sin coste alguno. Es más, muchas hierbas aromáticas ofrecenincreíbles beneficios para el organismo. La albahaca, por ejemplo, tiene propiedades antiinflamatorias y antibacterianas para combatir muchas enfermedades.

Por todo ello, muchos optan por plantar hierbas aromáticas en un rincón del jardín o balcón. Crear un jardín aromático en casa es una gran idea. Sin embargo, poca gente sabe que para tener albahaca y romero frescos y exuberantes, existe una regla que siguen los agricultores. He aquí algunos consejos que le ayudarán a cosechar hierbas aromáticas en abundancia sin correr el riesgo de que se sequen o mueran.

¿Dónde plantar hierbas aromáticas?

Además del suelo y la exposición al sol, la proximidad a otras plantas es importante para cultivar hierbas aromáticas. De hecho, hay algunas plantas que nunca deben cultivarse cerca unas de otras. Así que si ha decidido crear un rincón para hierbas aromáticas, necesita elegir las combinaciones adecuadas.

Empezando por el romero, cuyas raíces producen sustancias capaces de repeler insectos y parásitos. Aunque por tanto es adecuado para proteger las hortalizas de los ataques, el romero es perjudicial para otras hierbas, excepto la salvia y la lavanda. Estas dos plantas destacan por sus potentísimos sistemas radiculares que pueden rivalizar con los del romero.

En cuanto a la albahaca, esta planta amante del sol y el agua puede cultivarse cerca del perejil siempre que se mantenga a distancia. A la ciboulette también le gusta la tierra húmeda y soleada. Esto también mantendrá a las orugas alejadas de la albahaca.

Al tomillo no le gusta el agua, así que no plantes albahaca o perejil cerca de él. En su lugar, plántalo junto a la mejorana.

La menta es la única planta aromática solitaria. Su tendencia intrusiva puede ahogar las raíces de otras plantas. Lo mejor es podarla con frecuencia y mantenerla en una maceta separada de las demás. De esta forma, también podrás aprovechar su poder repelente.