Cultivar ajos en el balcón: ¡así se hace! ¡Es fácil y divertido!

¿Sabías que puedes cultivar tu planta de ajo cómodamente en casa, en el balcón o en el jardín? Es muy sencillo, ¡y enseguida te cuento cómo!

El ajo es un condimento ineludible en la cocina. Picado y utilizado en guarniciones, ineludible en el pesto genovés e imprescindible en la salsa boloñesa, es uno de los sabores preferidos de los aficionados a la cocina. En la cocina, es imposible decir que falta el ajo. Base de muchas recetas, toda cocina tiene al menos un manojo listo para usar colgado en la despensa, en el balcón o en recipientes herméticos.

El ajo bulboso está considerado como uno de los más aromáticos y curativos de todos los tiempos. Desde la antigüedad, su pulpa machacada se ha utilizado sobre las heridas para tener una rápida cicatrización. El ajo es rico en vitaminas A, B, C y D. Contiene varios minerales como hierro, potasio, zinc y magnesio y alina, una sustancia que se convierte en alicina capaz de prevenir el crecimiento de células cancerígenas. Por eso conviene tener siempre una vaina fresca y ecológica para utilizarla en la cocina pero también como cura.

¿Y si te dijéramos que cultivar una planta de ajo es muy sencillo? Averígualo.

Cultivar una planta de ajo en casa es muy fácil: sigue este método y podrás tenerla en macetas durante mucho tiempo.

El ajo es una de las plantas más sencillas de cultivar. Requiere muy pocos cuidados, se adapta al entorno y nunca corre peligro de morir. Sin embargo, en las primeras semanas de crecimiento, necesita muchos cuidados para que pueda volverse lujuriosa, fragante y sana.

El ajo no sólo es útil en la cocina, sino también para la salud. Preparando una tisana con dientes de ajo, puede beneficiarse de sus propiedades antiinflamatorias, antisépticas, antiespasmódicas y antigripales. Pero, ¿cómo se cultiva el ajo?

Elige dientes de ajo ecológicos y sin tratar. Coge un poco de tierra para macetas, viértela en una maceta y nivélala. Planta unos cuantos dientes en vertical con la piel, colocándolos a 5 centímetros de la superficie. Si quieres plantar más, recuerda espaciar los dientes de ajo entre ellos al menos 20 centímetros. La época ideal para plantar ajos es desde otoño hasta marzo. Sin embargo, dadas las temperaturas todavía frescas de la época, aún puede obtener una planta frondosa.

Riega tu plantón unas 2 veces por semana. Al cabo de unos días, notarás los primeros brotes. Sigue cuidándola hasta el verano, cuando podrás pasar a la fase de recolección. Tu planta estará lista cuando los tallos exteriores pasen de verde a amarillo/marrón con aspecto seco. Entonces puedes retirar toda la planta, limpiarla de tierra y dejarla secar hasta que la piel exterior parezca papel de seda. Guarde los dientes de ajo en un recipiente o déjelos colgados en un lugar fresco y seco. ¡Quedará humoso y sabroso !