Forma 3 bolas con el papel de aluminio y échalas al retrete. No tendrás que volver a preocuparte por la limpieza

¿Quiere ahorrar tiempo y dinero a la vez que mantiene limpia su casa? Pruebe estos sencillos trucos con papel de aluminio que no sólo funcionan en la cisterna del inodoro, sino también al lavar la ropa.

La mayoría de nosotros solemos tener cosas por casa que normalmente no utilizamos. O bien, las utilizamos para una actividad completamente distinta de la que realmente podríamos hacer. Por ejemplo, el papel de aluminio. Normalmente lo utilizamos cuando queremos preparar un bocadillo para los niños en el colegio o cubrir la comida que metemos en la nevera para que no se seque.

El papel de aluminio limpia el inodoro

Las bolas de papel de aluminio son un ayudante inestimable en el hogar, aunque mucha gente no sabe en qué circunstancias se pueden utilizar. Por ejemplo, puede mantener limpia  la cisterna del inodoro que se vuelve amarilla por dentro con el tiempo debido al agua dura. Sólo tienes que frotar un poco con el papel de aluminio y tendrás un inodoro limpio y blanco como cuando empezaste a usarlo. Este es uno de los primeros consejos, pero hay otros que seguro aplicarás en tu hogar.

Hablando de inodoros, veamos un truco similar. Si no quiere fregar el inodoro de rodillas, ¡no tiene por qué hacerlo! Sólo tiene que enrollar 3 bolas de papel de aluminio y colocarlas en la cisterna del inodoro . El papel de aluminio ayuda a mantener limpia y blanca la pared interior de la cisterna, que puede empezar a amarillear con el tiempo. Te sorprenderá cómo este truco funciona no sólo en inodoros normales, sino también en inodoros con cisternas ocultas. ¡También puedes probarlo en el inodoro del trabajo o del colegio!

También puede utilizar la película para lavar

Cuando laves la ropa, puedes probar un truco similar con papel de aluminio. Sólo tienes que coger un papel de aluminio normal y enrollar 2 ó 3 bolas con él. A continuación, mételas en la lavadora junto con la ropa sucia y activa cualquier programa con el detergente habitual.Una vez finalizado el proceso de lavado, apague la lavadora normalmente y saque la ropa. Se sorprenderá del aspecto de la ropa. De repente, toda la ropa parecerá planchada después del lavado.