El aceite de oliva es un ingrediente esencial que siempre está presente en todas las cocinas italianas. Podría definirse como un auténtico producto protagonista que resalta la cultura Made in Italy en todo el mundo. Existen mil usos diferentes, no sólo en el ámbito culinario, sino también para el bienestar y el hogar. También hay quien mete el tarro de aceite en el congelador durante toda la noche. ¿Para qué sirve? Los expertos del sector nos lo explican.
Jarra de aceite en el congelador
Todo el mundo se habrá gastado dinero en comprar un excelente aceite de oliva italiano de una marca conocida. Poco después, te lo llevas a casa y lo guardas en un lugar seguro: fresco y seco para utilizarlo en la cocina cuando lo necesites.También ocurre que al cabo de unos días aparecen grumos blancos y flotantes. En este caso, se trata de aceite congelado y no de cuerpos extraños con los que hay que tener cuidado.En algunos casos, el aceite puede cristalizar. Se trata de un fenómeno físico natural debido a un método de almacenamiento incorrecto.
El aderezo se elabora prensando las aceitunas en los meses de septiembre a noviembre a temperaturas que nunca son inferiores a 18 °C. Esta temperatura máxima es la recomendada para todos los productores, pero desgraciadamente pueden producirse cambios bruscos de temperatura durante el transporte.