El baño estará perfumado durante una semana: Todos tus invitados querrán saber el secreto

Para evitar la acumulación de gérmenes y bacterias, un cuarto de baño siempre limpio e higiénico es esencial para mantener a todos sanos.

Pero para que este lugar resulte acogedor y agradable, es igualmente importante mantenerlo fresco y perfumado. ¿No está realmente satisfecho con los ambientadores clásicos que se desvanecen demasiado rápido? Entonces es necesario recurrir a otras soluciones para conseguir el resultado deseado.

¿Buscas otras alternativas a los productos químicos cuyos ingredientes son a veces irritantes y agresivos? Estás de suerte: ¡te desvelamos el secreto para que tu baño huela fresco y perfumado durante toda una semana sin gastar prácticamente nada!

Polvos de hornear para perfumar tu baño

A menudo lo utilizas para eliminar manchas difíciles en la ropa o en las sartenes, pero ¿sabías que este ingrediente también tiene excelentes propiedades desodorizantes?

Por eso es especialmente eficaz para refrescar el cuarto de baño de forma permanente. De hecho, ayuda a absorber la humedad y, combinado con aceites esenciales, desprende un aroma muy agradable que puede durar toda una semana. Cómo utilizar el bicarbonato de sodio para perfumar el cuarto de baño?

Aquí tienes los pasos:

  • Pulveriza el lavabo con bicarbonato de sodio
  • Añade un poco de vinagre blanco.
  • A continuación, vierte unas gotas de tu aceite esencial favorito en el lavabo.
  • Toma una esponja y frota suavemente la zona.
  • A continuación, aclara el fregadero y sécalo bien con un paño suave de microfibra.

Inmediatamente, una agradable fragancia inundará toda la habitación. El procedimiento es sencillo y rápido de realizar: Basta con unos minutos para desodorizar perfectamente el cuarto de baño sin necesidad de utilizar costosos productos nocivos. Además, obtendrá resultados mejores y más duraderos.

Lengüeta de enjuague para desodorizar inodoros

La otra forma interesante de aromatizar permanentemente el baño es colocar una pastilla (de las que se usan para el lavavajillas) en la cisterna de los inodoros. Sólo tienes que asegurarte de que la pastilla tenga una capa que se disuelva en el agua, si no es así, retírala antes de meterla en la cisterna.

¿Cuál es la ventaja de este truco? Cada vez que sale el agua, la pastilla se disuelve y deja un agradable olor que se propaga por el aire. Toda la habitación se llena de esta delicada fragancia, que la hace aún más acogedora.

Si quieres intensificar el aroma, puedes añadir al agua unas gotas de aceite esencial o un poco de suavizante. Todo lo que tienes que hacer es volver a tapar la cisterna del inodoro y tirar de la cadena.

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