El falangio, también conocido como “planta araña”, es una planta popular apreciada no solo por su belleza ornamental, sino también por sus numerosos beneficios para la salud y el ambiente doméstico.
Originaria de las selvas tropicales de Brasil, esta planta tropical se ha convertido en un elemento común en los hogares de todo el mundo debido a su resistencia y facilidad de cuidado.
En este artículo, exploraremos cómo cuidar el falangio y sus beneficios, con especial atención a su papel en la purificación del aire doméstico.
Cómo cuidar el falangio
Luz y ubicación El falangio prospera en lugares luminosos, pero debe evitarse la exposición directa a la luz solar intensa. Colócalo en un sitio donde reciba luz indirecta o en una zona semisombreada de tu casa.
Temperatura y humedad Esta planta prefiere temperaturas moderadas y no tolera el frío extremo. Asegúrate de mantenerla alejada de corrientes de aire frío y de mantener una temperatura constante alrededor de 18-24°C. La humedad adecuada es esencial para el falangio, por lo que es recomendable rociar regularmente las hojas con agua o colocar la planta sobre un plato con agua y grava para aumentar la humedad ambiental.
Riego El falangio gusta de tener el suelo húmedo pero no demasiado empapado. Riégalo regularmente durante los meses más cálidos, asegurándote de que el suelo se seque ligeramente entre riegos. Durante el invierno, reduce la frecuencia de riego, pero asegúrate de que el suelo no se seque por completo.
Fertilización Fertiliza el falangio cada 2-4 semanas durante la primavera y el verano con un fertilizante líquido balanceado. Reduce la fertilización durante el otoño e invierno cuando la planta está inactiva.
Trasplante Trasplanta el falangio cada 1-2 años en primavera, utilizando un sustrato ligero y bien drenado. Si la planta se vuelve demasiado grande para su maceta, puedes dividir y trasplantar sus rizomas para obtener nuevas plantas.
Beneficios del falangio
Purificación del aire Uno de los beneficios más conocidos del falangio es su capacidad para purificar el aire doméstico. Sus hojas absorben sustancias nocivas como formaldehído, benceno y xileno, comunes en muchos productos del hogar, mejorando así la calidad del aire que respiramos.
Reducción del estrés Estudios han demostrado que la presencia de plantas en el hogar, incluido el falangio, puede reducir el estrés y mejorar el bienestar psicológico. La vista de las plantas y el cuidado de ellas pueden tener un efecto calmante y relajante en el estado de ánimo.
Mejora de la concentración y productividad Además de reducir el estrés, las plantas de interior como el falangio también pueden mejorar la concentración y la productividad. La presencia de plantas verdes en áreas de trabajo o estudio está asociada con una mayor atención y mejores capacidades cognitivas.
Decorativo Finalmente, el falangio añade un toque de frescura y verdor al ambiente doméstico. Sus hojas brillantes y coloridas crean una atmósfera acogedora y decorativa, contribuyendo a hacer tu hogar más agradable y confortable.
En conclusión, el falangio no solo es una hermosa planta de interior, sino que también ofrece una serie de beneficios para la salud y el ambiente doméstico. Con los cuidados adecuados y un entorno apropiado, esta planta puede enriquecer tu vida diaria y mejorar la calidad del aire que respiras.